La vida es como una obra de teatro que no permite ensayos. Por eso canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida, antes que el telón baje y la obra termine sin aplausos.

12 de enero de 2012


Capaz al mirar atrás, eran tiempos mejores en donde estaba feliz. En donde yo me arriesgué y al estar feliz me arriesgué más y más sin temerle a nada.
Si, "el que no, arriesga no gana". Pero a veces hay que tener en cuenta los riesgos que pueden surgir en el trascurso del tiempo. Porque quizás te encontrás en situaciones en que no sabes si es mejor  seguir o dejar de intentarlo, "No remes en donde no hay agua". Por eso también hay que saber PERDER o GANAR. 
Son frases claves, que uno a medida que va viviendo la vida se da cuenta que se encontró en esas situaciones. Situaciones en que nadie quiere arriesgarse. 
¿Sabes por qué? Porque todos tenemos miedo a PERDER. Tenemos miedo a los riesgos que pueden surgir. 
Pero si todos viviéramos con miedo, nadie llegaría a sus metas. Sin metas no hay vida.
Metas, son todas aquellas que toda persona las presenta a lo largo de su vida sin importar que sean metas inalcanzables. Pero para lograrlas uno tiene que arriesgarse sin temerle a nada, pase lo que pase y sin arrepentirse de lo que pasó.
Yo siempre me arriesgué. Me arriesgué por lo que quería por más que podía ser una meta inalcanzable, lo hice porque era lo que yo proponía hacer en mi vida.
Creo que es mejor decir: "al menos lo intenté", antes de preguntarme una y mil veces que habría pasado.
Pero está ves PERDÍ, no me arrepiento de todos los esfuerzos que hice. Solo sé que esta vez llegué demasiado lejos. Quería si o si cumplirlo, pero no reconocía de que ya todo estaba perdido. 
¿Pero porque? Porque no quería dejar de ver mi vida como la conocía. 
Ahora solo queda aceptarlo y mirar hacia otro lado. Buscando la manera de ser feliz, por más que el mundo te dé la espalda. "Cuando la vida te presente razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una razones para reír"
 Porque así va a ser todo, no siempre va a ser todo color de rosa. Pero hay que saber aprovechar también un poco la tristeza.
Aun sigo de pie y tratando de buscar otra salida, otra meta.